mayo 6, 2020
IEB fue destacado en ranking internacional SCimago 2020

-Estudio que evalúa la producción científica, innovación y divulgación de conocimiento, posicionó al centro chileno en el puesto 757, entre más de 7 mil entidades a nivel global.
Más de siete mil instituciones a nivel mundial que desarrollan conocimiento e investigación en múltiples áreas, fueron evaluadas en el ranking SCimago, entidad española independiente que, desde el 2009, efectúa este estudio para analizar la producción científica, innovación y divulgación a la sociedad.
En esta nueva versión, que se dio a conocer a fines de abril, el Instituto de Ecología y Biodiversidad, fue destacado junto a otras instituciones chilenas, situándose en el puesto 757 del ranking global. Asimismo, el IEB se posicionó como el número 30, entre 40 instituciones nacionales (Link a ranking)
En esta nómina, la Universidad de Chile lideró el primer lugar entre las organizaciones chilenas destacadas, seguida por la Universidad Católica, ubicando a ambas, dentro de las 10 mejores casas de estudio de América Latina. En tanto, el tercer lugar nacional, lo ocupó la Universidad de Concepción, siendo todas éstas universidades que albergan al IEB.
A nivel mundial, el ranking fue encabezado por la Chinese Academy of Science (China), seguido del Centre National de la Recherche Scientifique de Francia y el Ministerio de Educación de China. El cuarto lugar lo obtuvo la Universidad de Harvard, de Estados Unidos.
El foco de medición de SCimago, fundado en la revisión de bases de datos, considera doce variables agrupadas en tres áreas fundamentales: producción científica, que se mide a través de las publicaciones realizadas en revistas de impacto y que implica el 50% de ponderación. Luego está la innovación, que considera cuántas licencias o patentes generan las instituciones, con un 30% de ponderación, y finalmente, la divulgación a la sociedad, que alude, principalmente, al tráfico de información hacia la comunidad y presencia en sitios web, con un 20% de implicancia.
Juan Armesto, investigador del IEB, se refiere a este reconocimiento. “Si bien nuestro foco no está puesto en los rankings, es interesante observar esta evaluación internacional, pues permite saber cómo nos ubicamos en el contexto latinoamericano y mundial, en relación a la producción de investigación, innovación y su impacto en la sociedad. En ese sentido, que hayamos quedado en el percentil 70 es interesante, consideramos que somos una entidad relativamente joven en relación a otras que se destacan en este estudio y que además, cuentan con mayores recursos”, señala el ecólogo.
Por otro lado, cabe mencionar que la mayoría de instituciones chilenas destacadas en el ranking, corresponde a Universidades, las que mayormente, poseen más recursos, haciendo así más valioso el lugar en que se encuentra IEB.
En ese contexto, el investigador y presidente de la Fundación Senda Darwin, comenta que el IEB se ha fortalecido a través del tiempo y que la visión a futuro es continuar robusteciendo algunas áreas. “Como grupo, queremos avanzar más en el desarrollo de investigación. Pero también necesitamos fortalecer aspectos más débiles, como es la innovación, por ejemplo, a través de la transferencia de nuestro conocimiento a las empresas, y cómo nos conectamos con el medio productivo. Del mismo modo, también debemos hacer más fuerte nuestro vínculo con la sociedad”, comenta.
En el marco de los desafíos que propone Armesto, también se incluye incrementar la conexiones con las Regiones de Magallanes, Los Lagos y Coquimbo, donde el IEB cuenta con su red de investigadores y universidades albergantes.
Respecto a la contribución a la sociedad, más allá de lo que sugiere el ranking SCimago, el académico advierte que, hoy más que nunca, es fundamental avanzar también en la transferencia de conocimiento que tenga implicancias en la toma de decisiones y políticas públicas, que contribuyan a la protección del medio ambiente y con ello, de la sociedad y su bienestar.
En el marco de la actual pandemia, Juan Armesto remarca que es vital continuar integrando las temáticas de salud y medioambiente y desde la investigación y generación de conocimiento, ayudar a develar “tantas interrogantes que aún nos quedan por resolver”.

“Esperamos seguir contribuyendo en áreas claves, como las tendencias y variaciones climáticas y su impacto en la sociedad y economía de los países. Nuestro centro tiene bastante que decir, pues tenemos investigadores que trabajan en esos frentes y quienes están construyendo modelos de las respuestas biológicas a los cambios del clima que se avecinan. Además de estas predicciones, necesitamos incorporar la dinámica de los sistemas naturales, biológicos y los ecosistemas, entre otros”, finaliza el investigador.