octubre 8, 2019
Los avances y desafíos de la ciencia en Antártica: masivo congreso reunió a investigadores polares de Chile y el mundo

Durante tres días, Olmué congregó a destacados investigadores polares, incluyendo a científicos y estudiantes del IEB. Además, el premio “Espíritu Antártico” recayó sobre Elie Poulin en reconocimiento a su destacada trayectoria.
Entre el 3 y 5 de octubre, y en medio de intensas jornadas en la ciudad de Olmué, en la región de Valparaíso, se desarrolló el IX Congreso Chileno de Investigaciones Antárticas. El evento estuvo marcado por la asistencia de una gran diversidad de investigadores de amplia trayectoria, así como por las tres charlas magistrales de los invitados extranjeros del British Antarctic Survey, Peter Convey y Huw Griffiths, junto a Sharon Robinson de la Universidad de Wollongong, de Australia.
Marcelo Leppe, director nacional del Instituto Antártico Chileno (INACH), señaló que este congreso fue, sin duda, reflejo de cierta maduración nacional en este tema. «El Programa Nacional de Ciencia Antártica (PROCIEN) hoy día ejecuta 107 proyectos y es en promedio 15 años más joven de lo que se tenía hace 15 años atrás. Además, la participación de género en este programa es casi equivalente».
En las actividades participaron representantes de diversas instituciones, incluyendo a científicos y estudiantes del Instituto de Ecología y Biodiversidad (IEB).
“Este congreso es muy importante por el contexto actual, donde hay muchos focos sobre la situación de la criósfera, en especial por el nuevo informe del IPCC y la próxima COP25. Para Chile, mucho de eso tiene relación con la zona antártica y subantártica, entonces, este evento se desarrolla justo en un momento decisivo para ver el futuro y las prioridades de la investigación antártica en el país”, expresó Elie Poulin, profesor de la Universidad de Chile, científico del IEB, y miembro del Comité Nacional de Investigaciones Antárticas, designado por el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Fue precisamente por su vasta trayectoria en la investigación, docencia y formación de discípulos que Poulin recibió el premio Espíritu Antártico, un reconocimiento de sus pares por su destacada carrera, reflejada en la autoría de innumerables artículos científicos, en la dirección de más de una treintena de tesis de posgrado y pregrado, en su constante apoyo a la divulgación científica, y en su participación en diversas sociedades científicas, lo que le ha valido prestigio tanto a nivel nacional como internacional.
Al respecto, Leppe señaló que «al igual que las araucarias en la cordillera, que generan islas de colonización, es parecido a lo que están haciendo varios investigadores, entre ellos Elie Poulin, quien es reconocido en este encuentro con un premio que felicita su aporte y celebra su trayectoria».
Las mil y una caras de la Antártica
Los trabajos presentados por los asistentes, y en particular por los miembros del IEB, se destacaron por una amplia gama de temas, que oscilaron desde los microorganismos y animales vertebrados e invertebrados, hasta las algas y plantas vasculares terrestres.
De esa manera, los participantes pudieron conocer los avances en la eco-fisiología de las plantas vasculares antárticas y sus implicancias en el cambio climático, tema presentado por Lohengrin Cavieres; así como la actividad diazotrófica y desnitrificadora en dos cronosecuencias de la Antártica marítima, por Cecilia Pérez; la especiación críptica inesperada en el gasterópodo monotípico Neobuccinum eatoni, por Angie Díaz; la biogeografía de la microbiota en zonas antárticas y subantárticas, por Guillaume Schwob; y los desplazamientos de la distribución de mosquito antártico bajo un mundo extremo y cambiante, por Tamara Contador.
A lo anterior se sumaron otras investigaciones sobre los patrones biogeográficos en Laevilitorina caliginosa en el Océano Austral, expuesto por Claudio González-Wevar; la genómica de poblaciones en los pingüinos macaroni, por María José Frugone; y el efecto de las glaciaciones del Cuaternario en copépodos de agua dulce en Isla Signy, Orcadas del Sur, por Claudia Maturana.
Respecto a su tesis de doctorado, que cuenta con el apoyo de INACH y de la British Antarctic Survey, Maturana cuenta que “lo interesante del lugar de estudio es que es prácticamente único en el ecosistema antártico porque presenta muchos sistemas de agua dulce. Tiene alrededor de 17 lagos, algo que no se repite en otros lugares de Antártica”.
Por último, en la exhibición de posters participaron Carolina Pérez-Troncoso, quien mostró su trabajo sobre morfometría geométrica aplicada en Parochlus steinenii; Sebastián Rosenfeld, quien abordó la asociación de moluscos con comunidades de macroalgas de la Península Antártica; Daly Noll con los mitogenomas y divergencia adaptativa de los linajes del pingüino papua (Pygoscelis papua); y Claudio González-Wevar con la evidencia de especiación críptica en Aequiyoldia eightsii a lo largo de su distribución en distintas provincias del Océano Austral.
“Es importante mostrar nuestro trabajo en un congreso nacional. Chile se está posicionando en la ciencia antártica, y para ello es fundamental la colaboración entre distintas instituciones y el apoyo de INACH, que permite a estudiantes e investigadores que vayan a hacer ciencia en lugares remotos”, concluye Maturana.
La próxima versión del Congreso Chileno de Investigaciones Antárticas se llevará a cabo el año 2021. La sede escogida para ese entonces será la ciudad de Concepción, en la región del Biobío.
Fotografías gentileza Claudia Maturana.