April 20, 2020

Estación de IEB en Puerto Williams acogerá a personal de salud para enfrentar crisis por COVID-19

En menos de un mes las prioridades de nuestro país y el mundo han cambiado. Y hoy el foco se dirige mayormente, a liderar acciones que permitan proteger a nuestra población y ayudar a enfrentar la actual crisis por coronavirus. El Instituto de Ecología y Biodiversidad, IEB, no está ajeno a esta tarea y es por ello que, recientemente, firmó un convenio junto a la Universidad de Magallanes y el Parque Etnobotánico Omora, para entregar en comodato al Servicio de Salud -por 30 días y renovable-, la estación de campo del Programa de Conservación Biocultural Subantártica en Isla Navarino, del IEB-UMAG-Universidad de North Texas.

El inmueble, que se creó el año 2010 y que cuenta con más de 20 habitaciones, cocina y baño, dispondrá de sus instalaciones para albergar a personal de salud ante la contingencia sanitaria. Esto, con el objeto de reforzar el servicio hospitalario y los requerimientos que se susciten en Puerto Williams y la región.

“Como IEB entendemos que la protección y conservación de los ecosistemas tiene un afán de servicio público, pues nos preocupamos de resguardar servicios que son para todos los chilenos y la sociedad. Y dentro de ese objetivo por entregar bienestar, vamos a colaborar con el Servicio de Salud para que la isla, que está sumamente vulnerable, tenga más capacidad de recibir a personal de la salud para atender a los posibles contagios”, explica Claudia Papic, directora ejecutiva del IEB.

La integrante del centro, señala además, que esta misión de contribuir a la protección de ecosistemas, no está desvinculada del bienestar humano, razón por la cual, espera que esta acción concreta permita ayudar a la comunidad y al país en estos momentos complejos.

Algo de historia

En el extremo sur de Chile, se creó esta estación de campo, que busca respaldar la investigación, mayormente, dedicada a la filosofía ambiental y ciencia ecológica a nivel mundial. Desde su nacimiento, dicho espacio también se ha convertido en epicentro para desarrollar estudios sobre interacciones al largo plazo, involucrando además a la comunidad y autoridades locales. Esto, apoyando además las actividades y proyectos educativos del Parque Omora, y los diversos estudios que hacen de esta zona, un referente planetario en la conservación biocultural y ética ambiental.
En ese contexto, cabe destacar la importancia de Isla Navarino y el Parque Omora, con la existencia de un ecosistema muy particular: el bosque templado Subantártico, y el más austral de los bosques en el planeta. Este hábitat, se caracteriza por poseer una diversidad riquísima de líquenes y plantas no vasculares, como musgos y hepaticas.

En estos espacios, también habitan especies como ñirre, lenga, coigüe de Magallanes, canelo y otros. En ellos también, es posible divisar aves como el carpintero gigante, el rayadito y el fío fío.